La Carta [El Camino del Exceso]

Blog sin pretenciones, crudo y en directo... No pidan más.

25.7.10

Recuerdas...

Recuerdas esa entrada en la que escribía sobre lo mucho que odio los domingos...
En estos momentos no puedo ni respirar. Sólo puedo pensar lo mucho más que los odio ahora...

Alguna vez dije que solía imaginar lo peor de cada situación, o que al menos solía pensar en qué cosas podrían salir mal. Así de esa manera me preparaba mentalmente para cuando algo así sucediese yo pudiera mantener la calma y actuar con serenidad. Keeping my cool.
Todo esto, ya sabía yo que iba a pasar, pero ni pensar en estas cosas día y noche me pudieron preparar par alo que sentiría en estos momentos.

¿Cómo le hago? No sé, no sé como no estoy haciendo una tontería más grande y simplemente me limito a escribir estupideces. Será tal vez porque no tengo fuerzas, me tiemblan los brazos y siento un vacío en el estómago y un nudo en la garganta.

¿Qué estoy sintiendo en estos momentos? No lo sé, prefiero no averiguarlo y dejar que pase, algo así no puede ser consecuencia de nada bueno.

¿Qué va a pasar ahora? No tengo la más remota idea. Algo que me pudiera servir es lo que he estado haciendo cuando me pongo a hacer ejercicio. Me pongo el iPod, esucho música y solamente sigo y sigo pedaleando. Algo así tendría que ser. Ponerme música en la cabeza, bajar el switch del pensamiento y simplemente seguir.

No me quiero detener a pensar en estos momentos. No me quiero detener a sentir en estos momentos. Si hiciera alguna de estas cosas, creo que simplemente dejaría de funcionar como un ser humano, me rompería, me colapsaría y no sabría qué hacer. Así que mejor no, ahí lo dejo, incluso mientras escribo esto estoy tratando de escribirlo de manera automática y subconciente. Que salga todo lo que tenga que salir, simplemente déjalo salir, sácalo, para que no se acumule ahí dentro y explote. Tengo que buscar esas cosas. Tengo que buscar esos respiraderos, esas salidas de emergencia que me mantengan sano, que me mantengan cuerdo.

Ya estoy bastante destrozado, bastante rasgado, lastimado, herido, raspado, desangrentado.
No puedo hacer mucho al respecto. No puedo sanar estas heridas yo solo.
Sabes, he oído mucho que en ciertas circumstancias se requiere inducir el coma para poder tener posibilidades de salvar a un paciente. Creo que en este caso, es necesario inducir un coma al corazón, a la mente, para poder tener una posibilidad de salvarlo. Es la única oportunidad que le queda. Esto es todo o nada, y haré lo que sea necesario para tratar de salvar.

Y Dios, todos saben que la persona en coma simplemente está dormida, no siente, no está conciente de lo que pasa, pero todos a su alrededor lo miran con lástima, con dolor, con simpatía tal vez, dirán "pobre diablo". Sé que eso me va a pasar. Coño, a veces odio ser tan conciente de las cosas a mi alrededor. Pero más odio haber sido un inconciente de lo que pasaba conmigo, con lo que tuvimos. Fui un imbécil... y cómo lo cantó una persona que hoy se encuentra en coma, el gran maestro Cerati: "Ahora sé lo que es perder". Sólo he estado tratando de demostrar que soy el mejor. Supongo que ahora es mi oportunidad de demostrar que soy el mejor perdedor, aunque dudo que eso importe siquiera.

Y otro crimen quedará sin resolver...

Ya es hora, de que ese golpe se asiente. De que se induzca, de que trate salvar lo que pueda salvar de la única manera posible.

Ya no pienses, no lo hagas, no, deténte ahí...

5 comentarios:

JacquelineB. dijo...

¿Te quieres inducir una coma? No sé si quieres dejar de sentir o de procesar. Me parece que quieres drogar tu corazón y dejarlo torpe, escondido en un rincón. Entiendo las razones, pero no sé si sea lo mejor. El corazón, a mi opinión, siempre debe estar alerta. No se puede esperar que siempre actúe con coherencia, pero siempre debe estar despierto y palitando, latiendo cada sentimiento, sin nunca buscar adormecer las sensaciones.

Sin embargo, entiendo tu desesperación. Espero te puedas calmar la mente, para que tu corazón se encargue de mantenerte vivo. Tú busca tu paz.

Ssg. Rivera dijo...

Sé dónde está la paz. No necesito buscarla, ya sé dónde está.
Es sólo que no se deja alcanzar.
Adormecer, apagar, hibernar... ya hace rato que escribí esto y simplemente es algo que no puedo hacer. Para bien o para mal, no puedo dejar de sentir ni de procesar.

Así que sólo me queda aguantar.
Esperar a que llegue la calma después de esta tormenta, si no es que me ahogo primero.

JacquelineB. dijo...

No te ahogarás. Eres muy fuerte.

JacquelineB. dijo...

Ya toca que escribas otra entrada. Ya pasaron meses.

Anónimo dijo...

Ya toca que escribas otra entrada. Ya pasaron años.

Él:

Mi foto
Estudiante de Ingeniería Mecánica, asiduo de la música, el cine y la fotografía.

Tiempos Pasados Siempre Fueron Mejores

Tiempos Pasados Siempre Fueron Mejores
¿o tal vez no?