Odio los domingos, en especial esos en los que no hay nada que hacer y peor aún, no me dan ganas de hacer nada. Hoy será otro de esos domingos en los que mi mente se pondrá a dar vueltas y vueltas en asuntos pendientes. Esos asuntos que sé que hacen daño y por eso mismo los dejo pendientes. Arreglarlos o mandarlos al carajo... coño, uno sabe que aquí hay de dos cuando debiera haber de tres, eso es lo que me inquieta. Ahh! Qué bonito sería si fuera un verdadero gañán sin escrúpulos... pero no lo soy. En fin, me iré a pasar mi domingo sin que hacer pensando, pensando en cosas que ya debiera haber resuelto, o que nunca habrían tenido que pasar. Hay opciones, tal vez más de las que veo ahorita. Por eso odio estos domingos en que no hay nada que hacer mas que penar en cosas que de verdad no quisiera. Pero alguien tiene que resolver esto, no soy el único involucrado, pero alguien tiene que hacer algo. Me voy a pensar pues... que pinche domingo tan feo.
-n o r b-